bitcoin, criptógrafos
bitcoin, criptógrafos

CriptoAgosto: Bitcoin hizo nuestro el lenguaje secreto de los criptógrafos

Dijo Galileo que el mundo estaba escrito en lenguaje matemático. Mucho tiempo después, hoy, se nos dice que el mundo está escrito en software. Por supuesto, no son incompatibles las dos afirmaciones. Pero tal vez hoy se encuentran desactualizadas, pues lo que parece es que el mundo, al parecer, se está escribiendo criptográficamente. En especial desde el impulso que tomó con el nacimiento de Bitcoin.

Bitcoin y los criptógrafos

La criptografía está cuando pagamos con una tarjeta o cuando mandamos un mensaje por internet. Por supuesto, es el lenguaje de las criptomonedas. Cada día, hablamos en criptografía sin saberlo. Es nuestro lenguaje y muy posiblemente será nuestro lenguaje en el futuro próximo. Por eso, las empresas e instituciones que miran al futuro, para construirlo, demandan criptógrafos.

Paradójicamente, el lenguaje de los criptógrafos es secreto para la gran mayoría de los mortales. Pero no puede ser totalmente secreto, pues, de lo contrario no existiría la criptografía. Al menos, tiene que haber un criptógrafo capaz de descrifrarlo. Pero, además, nos dice algo fundamental sobre el secreto. Y es que todo secreto ha de estar, aunque sea mínimamente, compartido.

Las criptomonedas como palanca para la globalización económica 

Todo secreto es un producto social, que requiere la relación de varios implicados. Como apuntaba el sociólogo Simmel hace ya más de un siglo: el secreto crea comunidad. Ahora bien, con la extensión de la criptografía, tenemos una comunidad de criptógrafos creando sociedad. Nuestra sociedad.

Lejos de situarse en una especie de posición marginal, casi de secta mística, la comunidad de criptógrafos se ha situado en nuestro centro. Hablando un lenguaje que la gran mayoría no entendemos. Constituyéndose en la gran elite profesional de nuestros días. Habrá que seguir, en la medida de nuestras limitadas posibilidades, sus debates, sus discusiones éticas, sus proyecciones pragmáticas. Es decir, todo aquello que va más allá –o más acá- de su profunda lógica.

Imagen de Arek Socha en Pixabay 

También puedes seguirnos en nuestros canales de Telegram Twitter

Javier Callejo
Comparte esto:
Esta web utiliza cookies. Puedes ver aquí la Política de Cookies. Si continuas navegando estás aceptándola   
Privacidad