Cryptowars. La aparición del coronavirus en el mundo lo ha cambiado todo. La pandemia esta afectando a todos los ámbitos de nuestras vidas. Entre ellos, nuestra privacidad. Bajo el pretexto de «evitar que la pandemia se propague, son numerosos los intentos de los gobiernos por obtener información de nosotros. Como si la pandemia no fuera a propagarse por instalar más cámaras de seguridad o convertirnos en objetivos de vigilancia permanente.
También te puede interesar: La sociedad post Covid acelera la irrupción de monedas digitales de bancos centrales
La idea de un gobierno vigilante no es nueva. Ahí está el ejemplo de la República Popular China, que ha conseguido terminar con la pandemia controlando estrechamente los pasos de sus ciudadanos. O el de Corea del Sur, que ha actuado de manera similar.
Tras más de cuatro décadas sumergidos en las CryptoWars, somos muy conscientes de su alcance. Por ello, creaciones como la criptografía asimétrica, sistemas de comunicación P2P, aplicaciones en pro de la privacidad y la tecnología blockchain forman ahora parte de las herramientas que podemos usar para proteger nuestra privacidad. Los ciudadanos pedimos respeto por nuestra privacidad, pero los gobiernos se empeñan en saltarse nuestros deseos. De momento, aunque vamos ganando la batalla en muchos aspectos, la pandemia del coronavirus amenaza con cambiarlo todo.
CryptoWars, una realidad no conspiranoica
Seguramente, muchos de ustedes habrán escuchado la palabra CyrptoWars. Las CryptoWars o Guerras Criptos son una serie de acciones llevadas a cabo por diferentes gobiernos en todo el mundo. La mayoría, dirigidas a controlar la tecnología criptográfica, violentando así nuestro derecho a la privacidad. Aunque podría parecer que Gobierno de los Estados Unidos es el más interesado en lograr este objetivo, no actúa solo.
La razón de las CryptoWars es evitar que naciones extranjeras e individuos puedan manejar tecnología de cifrado que los gobiernos no puedan manipular y romper. De esta forma, nadie podría salvarse del espionaje. Todo empezó con la denominada Guerra Fría. Se pensaba que con la caída del Muro de Berlín, en el 89, que supuso el fin de la Guerra Fría, las cosas cambiarían. Sin embargo, muchos dirigentes políticos decidieron seguir adelante con las CryptoWars. Después de todo, controlar la información ayuda a controlar al mundo. Y si el control se cierne sobre los ciudadanos, el poder obtenido es mucho mayor.
Controlar la información, para controlar al virus
En este contexto, muchas de las acciones llevadas a cabo por algunos gobiernos les coloca en una posición ventajosa para obtener nuestros datos. Aplicaciones de smartphones diseñadas para saber dónde estamos o hemos estado o quiénes fueron nuestros últimos contactos. Incluso, miden nuestras constantes vitales, con las que nos etiquetan, teniendo acceso a nuestros datos en todo momento.
Y aunque en Europa este tipo aplicaciones no es habitual, sí se ha estudiado la posibilidad de su aplicación. Por ejemplo, un grupo de investigadores de la Universidad de Oxford publicó en la revista Science un articulo en el que señalan que la propagación viral es demasiado rápida para ser contenida mediante el seguimiento manual. Sin embargo, sí podría controlarse con un proceso más rápido, eficiente y a escala.
Así, recomiendan la creación de aplicaciones de seguimiento que permitan a las autoridades acceder a grandes cantidades de información. En especial, datos sobre ubicación y contactos de los individuos, a fin de controlar la expansión del virus.
También te puede interesar: Varias empresas trabajan para hacer de blockchain una solución global frente a Covid19
Blockchain una puerta abierta para manejar información con respecto a la privacidad
Por más peligrosas que puedan sonar estas ideas, muchas tienen una sustentación innegable. En una sociedad con grandes volúmenes de información, es necesario contar con sistemas que nos faciliten el acceso a dicha información en tiempo real. Pero ¿Qué podemos hacer para que nuestra privacidad no sea vulnerada por estas redes de captura de información? ¿Cómo asegurarnos de que nuestra privacidad no está en peligro?
Quizá la respuesta sea blockchain. Una aplicación capaz de generar los datos que necesitan las autoridades para tomar decisiones con las que proteger nuestra salud y que dicha información esté accesible públicamente desde una blockchain, protegiendo así la privacidad de las personas, es una buena manera de conseguir ambos objetivos. Las autoridades obtienen sus datos y los ciudadanos mantenemos nuestra privacidad protegida.
Soluciones en este sentido ya están llevándose a cabo. Los desarrolladores de la criptomoneda centrada en privacidad, Zcash, se han unido a la iniciativa de creación del protocolo TCN. Se trata de un protocolo que permitirá la creación de aplicaciones destinadas a capturar datos de personas y llevarlas a la blockchain. Todo ello, sin poner datos privados, con una solución auditable de principio a fin y con una seguridad de alto nivel, protegida por protocolos de pruebas de conocimiento cero.
Ubirch y Centogene también han creado una solución de este tipo. Centrada en ofrecer certificados públicamente verificables de no-contagiados. Una medida que puede ayudar a los gobiernos a abrir caminos para terminar la cuarentena y volver a la normalidad.
Ciertamente estos son algunos casos de uso en los que la blockchain puede servir de ayuda para evitar caer en la vigilancia masiva de los gobiernos. Lo que aún sigue vigente es la advertencia de los cypherpunks: «La lucha por la privacidad en el mundo digital es una guerra constante».
También puedes seguirnos en nuestros canales de Telegram y Twitter
- Tether, objeto de deseo de los bancos: gana $7.700 millones en 2024 con stablecoins - 1 noviembre, 2024
- MrBeast, el youtuber acusado de ganar millones en cripto de manera poco ética - 31 octubre, 2024
- El papel de la tokenización de activos en la revolución financiera - 30 octubre, 2024