Preguntada la IA ChatGPT sobre su capacidad para predecir el futuro, se muestra prudente. Como casi siempre que se pregunta sobre sus capacidades. Es un ejercicio de humildad continua. Nos dice que no puede predecir el futuro. Después, matiza: de manera precisa e infalible. Nada puede predecir el futuro de manera infalible. Es más, si leemos a Taleb y su Cisne Negro, ningún acontecimiento relevante es predecible. Por lo tanto, decirlo sin precisión es ya una capacidad relevante. Realmente, la IA predice a partir de datos que, a su vez, constituyen patrones. Pero lo importante suele estar fuera de los patrones. Por lo tanto, lo importante es impredecible. Lo que era predecible era la respuesta de la IA.
El triángulo del optimismo (1): futuro, ciudad e IA
Futuro IA
Para todo aquello que, más o menos, sigue patrones, la IA puede ser una valiosa herramienta de predicción. Es lo que ocurre, por ejemplo, con el pronóstico del tiempo. Puede decirnos el día que hará mañana o pasado mañana, pues tiene datos de cómo sucedieron los días de varios años antes. Ahora bien, no puede predecir una “Filomena”. Anuncia los cambios pautados.
La misma lógica que le vale a la IA para el pronóstico del tiempo, le sirve para las predicciones del tráfico. Analiza velozmente los numerosísimos datos producidos por múltiples fuentes a lo largo del tiempo sobre el tráfico en un punto determinado de la ciudad. Y aunque ese día puede ser un gran día, como canta Serrat, desde el punto de vista del tráfico será bastante semejante a los otros muchos días. Casi nosotros mismos, sin IA, somos capaces de predecir el tráfico que habrá en la M30 sentido norte entre las 7:45 y las 9:15 de la mañana de un día laboral cualquiera del mes de octubre.
La humildad de la IA
El otro gran campo de predicción, porque es también un campo gran productor de datos, es el de los mercados. La IA dibuja aceleradamente tendencias. Los inversores seguirán sus consejos. Y seguramente se producirá una de esas profecías autocumplidas.
El triángulo del optimismo (2): futuro, ciudad e IA
Después ya nos encontramos con las predicciones domésticas. Así, la IA puede predecir la necesidad de materiales y equipos en una fábrica. Como, también, el que te quedes sin huevos o leche en el frigorífico en X días.
Estoy casi seguro que la “humildad” de la IA oculta algo y predice cosas más relevantes. ¿Menos esperables? Difícil. ¿Predice la IA el futuro de la IA? Esto es lo que dice: “el futuro de la IA se caracteriza por una rápida evolución tecnológica y La forma en que se desarrolle dependerá en gran medida de cómo se aborden los desafíos éticos, regulatorios y técnicos a medida que la IA continúa avanzando un impacto cada vez mayor en nuestra sociedad.”
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