En un panorama donde las finanzas y la tecnología se entrelazan constantemente, el Banco Central de Italia ha dado un paso trascendental y ha diseñado una solución de Tecnología de Registro Distribuido (DLT) cimentada en un fork de Bitcoin. Esta estrategia no solo atiende a la creciente necesidad de contar con sistemas de pago más eficaces y seguros, sino que también tiene como objetivo incorporar las bondades de la tecnología blockchain en un ambiente fiscal controlado y regulado.
Con este proyecto, el Banco de Italia se convierte en pionero de la adopción de innovaciones que pueden revolucionar el sistema financiero italiano y, posiblemente, el europeo. El sistema DLT del Banco de Italia, que incorpora el protocolo de consenso llamado FBFT (FROSTed Byzantine Fault Tolerance), mezcla la solidez de la blockchain de Bitcoin con atributos exclusivos que potencian la privacidad y la seguridad.
Banco de Italia: fundamentos y motivaciones
La decisión del Banco de Italia de desarrollar una solución DLT se enmarca en un contexto de creciente interés por parte de los bancos centrales de todo el mundo en las monedas digitales y las tecnologías de registro distribuido. Con ello busca responder a la necesidad de modernizar los sistemas de pago, aumentar la eficiencia y mejorar la seguridad, lo que ha llevado a muchas instituciones a explorar la posibilidad de implementar sus propias versiones de blockchain.
El Banco de Italia ha identificado que, pese a las ventajas de las soluciones descentralizadas, un enfoque más controlado y regulado podría ofrecer mejores garantías de seguridad y privacidad. Esto es especialmente relevante en el contexto del sistema financiero, donde la confianza y la integridad son fundamentales. Así, el banco ha optado por adaptar la tecnología de Bitcoin, que ha demostrado ser robusta y segura, a un entorno de permisos donde solo un grupo limitado de validadores puede participar en el proceso de consenso.
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Objetivos del desarrollo
Los objetivos principales del desarrollo de esta DLT son:
- Mejorar la Eficiencia en las Transacciones: La solución DLT busca optimizar los procesos de validación y conciliación de transacciones, reduciendo el tiempo y los costos asociados.
- Aumentar la Seguridad: Al operar en un entorno de permisos, el banco puede garantizar un mayor control sobre quién puede validar las transacciones, lo que reduce el riesgo de fraudes y ataques cibernéticos.
- Facilitar la Innovación en Servicios Financieros: La DLT permitirá al Banco de Italia explorar nuevas aplicaciones, como la emisión de monedas digitales de banco central (CBDC) y la tokenización de activos.
- Mantener la Confidencialidad: La implementación de un protocolo que preserve la identidad de los validadores es crucial para proteger la integridad del sistema y la privacidad de los participantes.
Funcionamiento de la tecnología
Como ya indicamos, la DLT del Banco de Italia se basa en un fork de Bitcoin, lo que implica que se han realizado modificaciones al código original para adaptarlo a un entorno de permisos. Esta adaptación permite la eliminación de componentes innecesarios de Bitcoin, como el mecanismo de prueba de trabajo (PoW), que no es eficiente ni seguro en un contexto de validadores conocidos.
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Protocolo de consenso FBFT
En su lugar, el Banco de Italia ha apostado por el protocolo FBFT. El objetivo es que sea el núcleo de la solución DLT del Banco y está basado en la combinación de dos tecnologías clave:
- Practical Byzantine Fault Tolerance (PBFT): Este algoritmo permite a un grupo de nodos llegar a un consenso sobre el estado del sistema, incluso en presencia de fallos o comportamientos maliciosos. PBFT es ideal para entornos de permisos, donde los validadores son conocidos y de confianza.
- FROST (Flexible Round-Optimized Schnorr Threshold): Este esquema de firma permite a un grupo de validadores generar una firma conjunta para un bloque de transacciones. FROST no solo mejora la eficiencia al reducir el tamaño de las firmas, sino que también ofrece confidencialidad al ocultar las identidades de los validadores.
Proceso de validación de transacciones
El proceso de validación en la DLT del Banco de Italia se puede desglosar en varias etapas:
- Propuesta de Transacción: Los participantes envían transacciones a la red. Estas transacciones son recopiladas por los nodos validadores.
- Pre-propuesta: Un validador designado (el «primario») propone un bloque de transacciones a ser validado por el resto de los nodos.
- Fase de Preparación: Los validadores envían mensajes de preparación para indicar que están de acuerdo con el bloque propuesto.
- Fase de Compromiso: Una vez que se ha alcanzado un quórum de validadores se procede a firmar el bloque utilizando el esquema de firmas FROST. La firma resultante es una firma agregada que garantiza la validez del bloque sin revelar las identidades de los validadores.
- Propagación del Bloque: El bloque firmado se propaga a la red, y todos los nodos actualizan su copia del libro mayor.
Este proceso permite que la DLT del Banco de Italia mantenga un alto nivel de disponibilidad y tolerancia a fallos, lo que es crucial para aplicaciones críticas como las CBDC.
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Capacidades únicas para el banco y sus usuarios
La implementación de la Tecnología de Registro Distribuido (DLT) basada en Bitcoin por parte del Banco de Italia presenta una serie de ventajas significativas. En primer lugar, la combinación del protocolo FBFT y la confidencialidad de los validadores proporciona una sólida protección contra amenazas cibernéticas, preservando la identidad de los validadores y mejorando la seguridad del sistema.
Además, operando en un entorno de permisos, la DLT puede validar transacciones de manera más eficiente que una blockchain pública, lo cual es crucial en el sector financiero donde la rapidez es esencial. La DLT está diseñada para ser escalable, permitiendo la incorporación de nuevas funcionalidades como la tokenización de activos y la implementación de canales de pago de segunda capa. Su base en Bitcoin facilita la interoperabilidad con otros sistemas financieros, aprovechando la vasta infraestructura y ecosistema de aplicaciones existentes. Y finalmente, el Banco de Italia tiene planes de investigación y desarrollo continuos para su DLT, manteniéndose a la vanguardia de la innovación financiera.
A pesar de estas ventajas, el proyecto también presenta desafíos. La escalabilidad, la interoperabilidad y el marco regulatorio requieren una atención constante. El Banco de Italia está investigando soluciones de segunda capa para abordar los problemas de escalabilidad, trabajando en la estandarización y la interoperabilidad con otras instituciones y plataformas, y colaborando con los reguladores para desarrollar un marco claro que apoye la innovación segura.
Un paso adelante
El desarrollo de una solución DLT basada en un fork de Bitcoin por parte del Banco de Italia representa un avance significativo en la adaptación de las tecnologías blockchain en el sector financiero. Al integrar un protocolo de consenso innovador como el FBFT, el banco no solo mejora la seguridad y eficiencia de las transacciones, sino que también establece un modelo para otras instituciones financieras que buscan adoptar tecnologías similares.
Esta solución no solo responde a la creciente demanda de soluciones digitales en el ámbito financiero, sino que también posiciona al Banco de Italia como un líder en la investigación y desarrollo de tecnologías de registro distribuido. A medida que el mundo avanza hacia un futuro más digital, la capacidad de las instituciones financieras para adaptarse y adoptar nuevas tecnologías será crucial para su éxito continuo.
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