IBM X-force
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IBM X-Force publica un informe de amenazas criptográficas durante el año 2018.

En una reciente investigación llevada a cabo por los investigadores de IBM, han encontrado que el criptojacking dominó la escena del crimen cibernético de las criptomonedas durante el 2018 superando a los ataques de ransomware.

Los expertos dicen que la naturaleza comparativamente menos intrusiva y sigilosa de la criptografía minera, es la razón principal de este cambio.

El informe fue publicado por el equipo de IBM X-Force Research. En el informe, la empresa dejo en claro que en 2018 se produjo un aumento masivo de ataques cibernéticos. Además indican que el criptojacking dominó el campo, ya que los ciberdelincuentes parecieran alejarse del ransomware y malware.

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Los investigadores hicieron énfasis que la evolución de las amenazas ha sido muy grande. Ello significa que la mayoría de las amenazas ahora tienen una superficie de ataque mayor. A más victimas, más ganancias.

Esta situación es explicada por Caleb Barlow, Vicepresidente de Seguridad de IBM:

Si echamos la vista atrás al año 2018, me sorprende que el panorama de las amenazas de la ciberdelincuencia siga superándose año tras año. Durante el año pasado, hemos visto brechas históricas. Se descubrieron vulnerabilidades a gran escala. Además del surgimiento de la economía fiduciaria y reguladores que tratan de ayudar a darle sentido a todo.

El informe se indica que los ataques de criptominería furtivos aumentaron en un 450 % entre el primer trimestre y el cuarto trimestre de 2018. Mientras tanto, los ataques con software de rescate se redujeron en un 45 por ciento durante el mismo período. IBM dice que la extensión de la propagación de los ataques de criptojacking cubre tanto las plataformas de escritorio como las móviles.

La explicación de este cambio de actividad maliciosa, es que el cryptojacking es menos perturbador. Charles Henderson de IBM X-Force, explicó:

Con la extorsión del ransomware, se pierde el cliente después de una transacción. Bajo este modelo se afecta a una victima y está hecho. No hay ingresos recurrentes, es decir, es solo un mal negocio.

Según Henderson, el criptojacking es similar a un modelo de suscripción. En este los ingresos por piratería informática pueden contar con un flujo continuo de ingresos mientras las víctimas no se enteren. En cambio, para los ataques de ransomware, el atacante solo recibe un pago al por mayor por cada víctima.

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